Una Segunda Mirada: El Difícil Problema de Interpretar la Ciencia

Estudiar investigación científica es complicado por muchas cosas.

Por Dr. Robert B. Golenbock

En primer lugar, los humanos no vivimos en tubos de pruebas. Hay muchos otros factores que afectan sus vidas. En segundo lugar, las personas que realizan la investigación no siempre facilitan la comprensión de lo que han hecho. En tercer lugar, a veces hay intentos deliberados de falsificar los resultados. Quizás recuerde que los estudios falsos que vinculan el autismo con las vacunas fueron impulsados por un abogado que quería ganar dinero demandando a las compañías farmacéuticas. El resultado fue que los padres asustados retrasaron la vacunación de sus bebés y algunos murieron. Veamos otro ejemplo que está en curso.

Desde la década de 1980, se han realizado estudios que analizan el efecto de ciertos medicamentos tomados por mujeres embarazadas en el desarrollo cerebral de sus hijos. Se puede ver el paralelo aquí: la recompensa para los abogados que pueden convencer a los jurados de la validez de sus casos es enorme. Y recuerde que los abogados no tienen que demostrar que su caso es científicamente exacto. El otro factor que complica la situación es que un cierto número de niños tendrán trastornos neurológicos, ya sea que la madre esté tomando medicamentos o no. Mostrar una diferencia estadística puede ser un gran desafío. Les advierto que hay mucha información en línea que da mucho miedo, pero no es precisa.

Si busca “Tylenol y autismo”, encontrará varios artículos (y muchos abogados) que alientan a prestar atención a sus argumentos. La ciencia real, sin embargo, es muy débil. Menciono esto porque la información aparece en Facebook y otros sitios de redes sociales no científicos. He estado observando este tema por un tiempo. La investigación más importante se publicó en marzo de este año después de que se evaluaran muchos años de datos. Esta es la conclusión: actualmente no existe evidencia sólida de que el uso de paracetamol durante el embarazo cause autismo o TDAH en los niños. Los grupos de expertos siguen recomendando el uso del fármaco durante el embarazo cuando sea necesario y previa consulta con un médico.

Presento esta información para tranquilizarlo y recordarle que Dr. Google no es necesariamente su mejor fuente de información. Si tiene preguntas sobre algo que escuchó o leyó, consulte a su pediatra. También puedes escribirme mediante Tribuna, y estaré encantado de ayudarte. Por supuesto, no puedo responder preguntas específicas sobre la salud de su hijo.

Ahora quiero hablarte de algunas investigaciones que deberían hacerle pensar. Se trata de lesiones en la cabeza sufridas por niños que practican deportes de contacto. Se estudiaron adultos jóvenes que habían muerto por diversas causas y que practicaban deportes de contacto en equipos juveniles, de secundaria o universitarios. Casi la mitad tenía evidencia leve de encefalopatía traumática crónica (CTE), que en los jugadores de fútbol profesionales en particular se ha asociado con daño cerebral grave y, en ocasiones, muerte prematura. Casi todos los adultos jóvenes con CTE eran sintomáticos, pero también lo eran algunas personas que no tenían CTE, por lo que no está claro qué tan significativos son estos hallazgos. La conclusión fue que los síntomas, incluidos los cambios de humor y de comportamiento, eran comunes en los atletas que practicaban deportes de contacto, y estos síntomas son reversibles con el cuidado y manejo adecuados. Todavía no sabemos realmente si el daño cerebral leve es reversible o si empeorará a medida que el paciente envejezca.

Otros estudios analizaron la cuestión más específica de la recuperación después de una conmoción cerebral. Un artículo concluye: "[No hay] evidencia de diferencias clínicas significativas en el coeficiente intelectual después de una conmoción cerebral pediátrica". Otro sugiere que la recuperación lenta puede estar relacionada con otros factores no reconocidos antes de la lesión en la cabeza, como la ansiedad.

Lo importante aquí es que, si bien ya no ignoramos la posibilidad de daños a largo plazo por lesiones en la cabeza de los niños, tampoco exageramos las posibilidades. En particular, se debe seguir controlando a los niños que continúan teniendo dolor de cabeza o fatiga. Hable con su pediatra. Su hijo puede ser remitido para una evaluación especializada. La cuestión de si su hijo debe volver a practicar deportes no es sencilla y usted puede obtener ayuda con su decisión.

Robert B. Golenbock, MD, está actualmente jubilado. Ha cuidado a niños en el área de Danbury durante 43 años, incluso en el Centro de Medicina Pediátrica. El CPM está ubicado en 107 Newtown Rd, #1D, Danbury, CT, 06810. Para más información, llame al (203) 790-0822 o visite https://centerforpediatricmedct.com.