Cómo Identificar al “Grooming” y Apoyar a su Hijo
¿Ha oído la sobre el “grooming”? Hay mucha desinformación sobre esto, y a los efectos de esta conversación, no nos referimos al cuidado de su mascota.
Dado que abril es el mes de concientización sobre el abuso infantil y la agresión sexual, estamos aquí para hablar sobre cómo puede ser esto. El “grooming” o engaño pederasta es una serie de conductas manipuladoras utilizadas por alguien que la víctima suele conocer como una táctica para abusar sexualmente de un niño o adolescente. Los abusadores pueden ser adultos, familiares o incluso compañeros.
Aproximadamente uno de cada 10 niños sufre abuso sexual. El abuso sexual no tiene por qué implicar fuerza o incluso contacto. Es posible que no siempre se sienta como si estuvieran siendo abusados porque el proceso de preparación hace que parezca que se trata de un comportamiento normal.
Diferentes puntos de vista culturales sobre los límites pueden desdibujar la línea entre una relación saludable entre un adulto y un niño y una relación no saludable o potencialmente dañina entre un adulto y un niño. En el Centro para el Empoderamiento y la Educación (CEE), queremos ayudar a educar a la comunidad sobre cómo identificar comportamientos abusivos o de acicalamiento.
El proceso de preparación consiste en acceso, confianza, desensibilización, aislamiento y abuso.
Acceso: Los abusadores a menudo se esconden a la vista y buscan oportunidades para estar cerca de los niños, ya sea trabajando en entornos específicos o estando conectados con ciertas comunidades. Estos entornos pueden incluir escuelas, deportes/actividades, organizaciones religiosas, guarderías/guarderías o campamentos de verano. Los abusadores pueden ser cualquiera: vecinos, amigos de la familia, familiares, compañeros y otras figuras confiables de la comunidad. La mayoría de la gente no es abusiva; sin embargo, aquellos que lo son tienden a abusar de muchas víctimas.
Confianza: Los abusadores trabajarán para ganarse la confianza de la víctima, y/o la confianza de familiares o amigos, de varias maneras, incluyendo contarles secretos a las víctimas o tratar de conectarse emocionalmente, hacerles favores, prestarles atención exclusiva o excesiva, brindarles regalos o compartir intereses similares.
Desensibilización: Desensibilizar a la víctima ante cualquier abuso o manipulación reduce el riesgo de que atrapen al abusador, ya que normaliza el abuso para la víctima. El proceso de preparación en sí puede llevar meses o años antes de que se produzca el abuso sexual. El abusador puede comenzar exponiendo a la víctima a lo largo del tiempo a la desnudez o imágenes sexuales, hablando del sexo u otros temas "maduros", tocando partes no íntimas de su cuerpo, todo con la intención de aumentar gradualmente su nivel de comodidad con estos comportamientos para que cuando el abuso ocurra, parezca “normal”.
Aislamiento: El abusador hará esfuerzos por aislar y alejar a la víctima de las personas más cercanas a ella, pero esto suele ocurrir mucho más tarde en el proceso.
Abuso: No siempre habrá signos físicos de abuso. Las señales a las que debe prestar atención incluyen que su hijo regrese a casa con regalos o artículos costosos que no puede pagar, que tenga conocimientos sexuales inapropiados o un mayor comportamiento sexual, y que defienda el comportamiento inapropiado del abusador o lo mantenga en secreto.
Eduque a sus hijos sobre los límites, escúchelos y créales si comparten que alguien los lastimó o cruzó una línea y los hizo sentir incómodos, y conéctese de inmediato con un profesional de su escuela, la policía o CEE.
Si usted o alguien que conoce necesita ayuda, nuestras líneas directas confidenciales sin costo están disponibles las 24 horas, 7 días de la semana.
Línea directa de violencia doméstica (203)731-5206
Línea directa de agresión sexual (203)731-5204
Este artículo fue escrito por Cara Durante, Directora de Impacto Comunitario y Cristina Cabral, Gerente de Programas Comunitarios.