Santa Teresa de Calcuta una vez dijo la famosa frase: "hambrienta no solo de pan, sino de amor. Desnuda no solo de ropa, sino de dignidad humana y respeto. Sin hogar no solo por falta de una casa de ladrillos, sino por el rechazo". Yo me pregunto qué diría esta mujer que dedicó su vida al cuidado de los pobres sobre la reciente caracterización de los residentes más vulnerables de Danbury.  

La Comisión de Zonificación de Danbury está escuchando actualmente una propuesta para convertir el antiguo hotel Super 8 en Lake Avenue Extension en un refugio permanente para personas sin hogar. La propuesta de Pacific House, una agencia sin fines de lucro para personas sin hogar, implica convertir la antigua ubicación del hotel en un refugio permanente que también brindará servicios sociales como colocación laboral, asesoramiento para adicciones y asistencia para adquirir una vivienda permanente para sus residentes. Si bien la propuesta ha recibido elogios de los funcionarios locales y defensores de las personas sin hogar, algunos vecinos que viven cerca de la instalación han expresado su feroz oposición al plan, expresando sus comentarios más críticos a los ocupantes del refugio. Palabras de prejuicio como “drogadictos”, “prostitutas”, “delincuentes sexuales” y “criminales” fueron empleadas por los críticos para caracterizar a sus posibles ocupantes.  

A pesar que hay evidencia de lo contrario, proporcionada por la policía local, los críticos alegan que el refugio temporal es responsable de un aumento de la delincuencia en la zona. Mientras tanto, estos mismos críticos afirman que no están en contra de la población sin hogar, sino que están preocupados por la seguridad de su vecindario. Uno debe preguntarse si estos mismos críticos están intentando insultar la inteligencia del público, que conoce bien la larga y documentada historia de delitos en el vecindario del albergue propuesto.  

La prostitución, consumo de drogas y el crimen son una realidad en Mill Ridge Road, infame por la licorería vecina y la tienda de juguetes sexuales. Hace unos meses, cuando Yhameek Johnson, de 18 años, perdió la vida en un tiroteo desde un vehículo en Mill Ridge Road, el incidente provocó que las escuelas del área entraran en modo de bloqueo. El tiroteo es el último capítulo de una disputa entre dos grupos rivales que ha plagado a la comunidad durante años. No fue hace mucho tiempo cuando otro tiroteo a un joven en Churchill Road cerca del patio de recreo de la escuela primaria Mill Ridge resultó en el cierre de las instalaciones educativas.  

Los delitos asociados con las drogas y prostitución eran más frecuentes en el área cuando el desarrollo de viviendas públicas se encontraba en lo alto de High Ridge Road, y sigue siendo una preocupación para las personas de color en el vecindario hasta el día de hoy. Supongo que los oponentes del refugio no “leyeron el memorando” sobre la historia de su comunidad o prestaron atención a las preocupaciones de las personas de color en el área hasta que el problema aterrizó en su puerta.  

Debemos enfrentar la realidad que Danbury tiene un problema de personas sin hogar que merece nuestra atención inmediata. La población más vulnerable de la ciudad no merece ser etiquetada con viejos prejuicios y estereotipos de residentes que harían que las personas sin hogar se conviertan en problema de otra persona.